La presidenta Claudia Sheinbaum confirmó que, tras un amplio consenso entre sectores empresarial, sindical, académico, gubernamental y sociedad civil, enviará al Senado la reforma que permitirá instaurar la jornada laboral de 40 horas a partir de 2026.

Durante “Las mañaneras del pueblo”, Sheinbaum destacó que esta reducción gradual —prevista en su compromiso número 60— ha demostrado mejorar la productividad en países que ya la aplican, sin representar mayores costos para las empresas.

El secretario del Trabajo, Marath Baruch Bolaños López, explicó que la reforma será un derecho constitucional y se implementará de la siguiente manera:

• 1 de mayo de 2026: entra en vigor el decreto y se activa el periodo de transición.
• 2027: la jornada se ajustará a 46 horas.
• 2028: bajará a 44 horas.
• 2029: se reducirá a 42 horas.
• 2030: quedará en 40 horas semanales.

Aclaró que no habrá disminución de salarios ni prestaciones. Además, por primera vez, quedará prohibido el trabajo extra para personas menores de edad.

La propuesta también define un límite de horas extraordinarias, permitiendo de 9 a 12 por semana de forma voluntaria, sin exceder cuatro horas diarias y en un máximo de cuatro días. Asimismo, se establecerá un registro electrónico obligatorio para que las empresas reporten las jornadas laborales y se garantice su cumplimiento.

De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la reducción de horas laborales aporta beneficios como menos fatiga, disminución de accidentes, mejor salud física y mental, mayor equilibrio entre vida personal y laboral, y mejor autocuidado.

La iniciativa es resultado de más de 40 mesas de trabajo realizadas entre junio y noviembre, con la participación de más de 2 mil personas de distintos sectores.
Tanto el Consejo Coordinador Empresarial como el Congreso del Trabajo reconocieron que este paso significa un avance importante en materia de justicia social y bienestar para la clase trabajadora.